Manuel Bermejo, profesor Empresa Familiar IE BUSINESS SCHOOL
La suerte juega su papel en toda trayectoria, empresarial o personal. No conozco ningún empresario ni ninguna familia empresaria brillante que cuando repasa su obra apele, en algún momento, a la suerte. Tuve la suerte de que un cliente importante creyó en mí desde el principio, tuve la suerte de contar con un magnífico equipo, tuve la suerte de tener un gran éxito con el primer producto que lanzamos o tuve la suerte de contar con una gran familia que me apoyó siempre.
Así que sirva este primer post del nuevo año para desear la mejor de las suertes a los miembros de sagas familiares que nos siguen en este post. Eso sí, no olvidemos que la suerte hay que buscarla también. Por mi ya larga experiencia como miembros de familia empresaria y acompañando a muchas en mis tareas académicas y de asesoramiento me permito compartir lo siguiente:
- Cuanto más trabajo, más suerte tengo.
- Cuanto más haqueysta soy y menos esqueista , más suerte tengo
- Cuanto más me preocupo por abordar las profundas transformaciones que demanda este tiempo nuevo que vivimos convirtiéndome en una empresa familiar 3.0., más suerte tengo
- Cuanto más nítida es mi hoja de ruta para asegurar la continuidad y sostenibilidad de mi empresa familiar, más suerte tengo
- Cuanto más tiempo y recursos de calidad dedico a la gestión de la familia, más suerte tengo
- Cuanto más trabajo por dotar a mi empresa de liderazgo y cultura emprendedora, más suerte tengo
- Cuanto más aseguro que en los procesos sucesorios haya un líder emprendedor por generación, más suerte tengo
- Cuanto más eficiente es mi sistema de gobierno corporativo familiar, más suerte tengo
- Cuanto más claro tengo por qué me compran mis clientes, más suerte tengo
- Cuanto más me esfuerzo en analizar y adaptarme a las evoluciones del entorno, más suerte tengo.
- Cuanto más estudio mi entorno y amplio mi perímetro de visión, más suerte tengo
- Cuanto mejores, por más adaptados al entorno evolutivo en el que compito, productos o servicios pongo en el mercado, más suerte tengo.
- Cuanto más eficaz uso de los recursos hago, más suerte tengo.
- Cuantos más productos, procesos o servicios propietarios construyo, más suerte tengo
- Cuanta más gente competente, motivada y comprometida me rodea en mi proyecto, y menos primos bandarras, más suerte tengo.
- Cuanto más invierto en formar y desarrollar a mi gente, más suerte tengo.
- Cuanto más invierto en formarme y desarrollarme, más suerte tengo.
- Cuanto más me credibilizo y credibilizo mi proyecto, más suerte tengo
- Cuanto menos “hablar por hablar” y más me esfuerzo en alinear voluntades y estrategias con mensajes claros y persuasivos, más suerte tengo
- Cuanto más me preocupo por abordar las profundas transformaciones que demanda este tiempo nuevo que vivimos convirtiéndome en una empresa familiar 3.0., más suerte tengo
- Cuanto mejor balanceo lo urgente y lo importante, más suerte tengo
- Cuanto mejor balanceo valores tradicionales e innovación adaptativa, más suerte tengo
- Cuanta más mirada y acción internacional tengo, más suerte tengo.
- Cuantos más momentos napoleónicos dedico al gobierno de mi empresa, verdadera atalaya de reflexión estratégica, más suerte tengo.
- Cuando más invierto en innovación, más suerte tengo.
- Cuanto más me preocupo de intangibles como la reputación, los valores, o la construcción de una marca fuerte, más suerte tengo.
- Cuanto más me inspiro en los Ortegas célebres, mirada larga, pensar en grande y cuidar los detalles, más suerte tengo
- Cuanta más ayuda pido en mi entorno a especialistas en temas que no domino, más suerte tengo.
- Cuanto más foco pongo en la competitividad de mi negocio, más suerte tengo.
- Cuanto más practico principios como altura de miras, generosidad o lealtad, más suerte tengo
- Cuantos más sólidos valores cultivo en mi empresa, más suerte tengo
- Cuanto más me administro, obviando los temas que no aportan valor y los que forman parte de las pequeñas vilezas humanas, más suerte tengo.
- Cuanto más me esfuerzo en cultivar mi felicidad, más felices son los que me rodean y más suerte tengo.
- Cuanto más tiempo de calidad dedico a cuidar mi entorno familiar y personal, más suerte tengo.
- ¡Ah! Y casi me olvido… Cuanta más pasión le pongo a todo lo que emprendo en la vida, más suerte tengo.
Hasta pronto. No dejes de esforzarte por ser muy feliz que, al final del día, es lo más importante para ti y los que te rodean